El protagonista se disculpa por no haber expresado lo importante que el compañero era para ella y pide perdón por causar dolor y lágrimas. Admite que no merece más, pero sin el compañero no sabe cómo vivir. Ruega al compañero que se quede con ella, diciendo que si se va, el sol no brillará. El protagonista reconoce que ya no hay recuerdos del pasado excepto por las horas pasadas amando la piel del compañero. Le suplica al compañero que se quede con ella, pidiendo perdón nuevamente. El protagonista se da cuenta de que aunque el compañero se vaya, no lo olvidará y le pide que se quede con ella porque sin él, el sol no saldrá.