El protagonista se siente inquieto e insatisfecho viviendo en la ciudad, así que decide irse sin ninguna advertencia. A pesar de la creencia de su madre de que el amor lo hará regresar a casa, ha estado siguiendo un camino solitario durante demasiado tiempo. Sueña con encontrar paz y pertenencia, simbolizada por un columpio de porche con luces, y pide oraciones para ayudarlo a encontrar su camino de regreso a casa. Reflexiona sobre su relación pasada, donde su pareja ha seguido adelante con alguien más, pero él todavía espera encontrar su camino de regreso a casa.