El protagonista está enamorado de su pareja y la valora profundamente. Sin embargo, hay ocasiones en las que llega a casa ebrio y trata de mostrarle cariño, pero ella ya está dormida y no siente su contacto. Se siente solo y encuentra consuelo en su almohada, que representa a su pareja cuando no está. Anhela su presencia y rememora los momentos que pasaron juntos, pero al final acepta que todo pasa, incluyendo el sufrimiento y las palabras. Solo le queda su almohada, a la que se aferra mientras se duerme y se despierta sin ella. El protagonista constantemente piensa y siente la ausencia de su pareja, pero solo encuentra consuelo en su almohada.