El protagonista está asustado e inseguro acerca de algo. Conoció a su pareja en un campamento de verano donde ambos estaban solos, y juntos causaron problemas al robar cosas y provocar incendios. No entiende por qué alguien les perdona, y no quiere que su pareja le tome de la mano, solo quiere rendirse. Rememoran cuando chocaron en el coche de su padre y se tragan estrellas. No entiende si a alguien les importaría que ellos desaparecieran, pero aún así quiere tomar su mano. Hablan de pasteles de chocolate y lámparas de lava, y aunque él aún no está vivo, solo quiere tomar su mano. A pesar de que todos los demás mueren, siente que ella ni siquiera lo intenta.