La canción habla de cómo todo pasa, pero lo que hace el protagonista perdura y él crea caminos para sí mismo, incluso en el mar. Él dice que no le importa la fama ni dejar una impresión duradera en las personas, simplemente le gusta crear mundos delicados y elegantes como burbujas, observándolos flotar y estallar bajo el cielo azul. El coro repite la idea de que no hay un camino claro en la vida, sino que creas el tuyo propio a medida que avanzas, y cuando miras hacia atrás, ves el camino que has trazado que nunca se puede volver a recorrer. El final de la canción habla de un poeta que lloró mientras se alejaba hacia lo desconocido, diciendo que no hay un camino claro, sino que tú vas abriendo tu propio camino, paso a paso.