La canción comienza con un discurso de Winston Churchill sobre no rendirse. Luego, las letras cuentan la historia de un hombre que fue llamado tonto y ridiculizado, pero aún así intentó salvar a las personas incluso cuando parecía demasiado tarde. El coro dice que el protagonista entiende lo difícil que puede ser la vida, pero anima a su amigo a seguir adelante y no rendirse. La canción termina con algunas preguntas sobre la religión, y el protagonista llamando a diferentes personalidades estereotípicas antes de preguntar cuál será la última contribución del oyente al mundo.