El protagonista está hablando con su pareja, reconociendo que tenían razón acerca de algo y ahora quieren seguir adelante. Mencionan que salieron en coche tarde por la noche y no pueden volver, pero no se sienten mal al respecto. El protagonista le pregunta a su pareja hacia dónde deberían ir desde aquí, ya sea lejos o cerca, y expresan ganas de comer un pastel que su pareja hizo. Reflexionan sobre cómo la vida no siempre es justa, pero eso no les importaba cuando estaban juntos. La canción termina con la frase repetida "Vamos, vamos, vamos..." sugiriendo el deseo de seguir avanzando.