El protagonista se cuestiona por qué existe tanto sufrimiento e injusticia en el mundo y se pregunta si el amor ha muerto, si falta compasión o si Dios los ha olvidado. Expresan su deseo de ver a un niño feliz y capaz de jugar, correr y soñar de nuevo, y prometen vivir y luchar por su pareja hasta que puedan encontrar la felicidad y la risa nuevamente. El protagonista también reflexiona sobre las dificultades que enfrenta un niño que ha perdido la esperanza, sin un hogar amoroso ni una madre que los abrace, y se pregunta qué mal habrían podido cometer. Destacan la importancia de no olvidar que todos fuimos niños alguna vez.