El protagonista se encuentra en una relación problemática y se siente atacado por su pareja. Está comenzando a convertirse en alguien que no reconoce y no puede manejar. Intenta dejar atrás el pasado, pero no puede olvidar las razones por las que su pareja lo maltrata cuando ella está deprimida. Se da cuenta de que ella solo está interesada en sus propios deseos, no en los suyos. No entiende cómo puede mirarlo de la misma manera sabiendo que nunca podrá verla de la misma manera nuevamente. Prefiere mentirse a sí mismo y mantener viva la esperanza. Se da cuenta de que él apunta alto, mientras que ella apunta bajo. Ella ha llevado las cosas demasiado lejos y ya no queda a donde ir en su relación. Se cuestiona por qué ella lo trata así cuando se siente mal, solo para sentirse mejor consigo misma. Al final, se da cuenta de que ella nunca estará bien.