El protagonista ve a una mujer bailando en la playa y quiere que ella se tome un descanso y hable con él. Le dice que no hay nada más allá del mar y le pide que se quede con él. El coro imagina que podrían volar bajo el mar y vivir una vida submarina sin necesidad de subir a la superficie a respirar. También menciona a una sirena y una medusa, pidiéndole a la medusa que les enseñe a bailar. En el segundo verso, Caloncho habla sobre cómo descendió tranquilamente en espiral y se sintió deshidratado por el sol, pero no está claro cómo esto se conecta con el resto de la canción. El final simplemente repite el coro, mencionando nuevamente a la sirena y la medusa.