El protagonista no se defendió cuando lo atacaron y no se cayó en defensa propia. Solía huir de un mundo de mentiras, pero ahora está atrapado en la peor parte de la vida. La primera vez que sostuvo a su pareja en sus brazos, lloró y dijo que no había hecho nada malo, pero había fracasado muchas veces antes y quería que él borrara sus pecados con amor. Ya había sido besada por otros y tenía la marca del dolor en ella. Aunque la amaba ferozmente, ella solo le traía amargura e incomodidad, y él prefería perderla antes que seguir siendo lastimado por ella.