La canción habla acerca de una mujer peligrosa y seductora que no puede ser controlada. El protagonista se siente atraído hacia ella a pesar de saber que no es buena para él, y la compara con una hermosa modelo y una diosa. Sin embargo, reconoce que ella está llena de malicia y veneno, y trata de resistirse pero no puede evitar verse atraído por sus besos y toques. Bad Bunny agrega sus propios versos, describiendo cómo ella utiliza a los hombres como si fuera un juego de ruleta rusa, y cómo su ropa de diseñador y su rostro demoníaco la hacen aún más atractiva y peligrosa. En general, la canción alaba a esta femme fatale por su confianza y belleza, pero también advierte que no se puede confiar en ella.