A veces, la protagonista se siente sorprendida e imagina cosas que no son reales. A veces pierde el rumbo de lo que estaba haciendo, tal vez porque su pareja no está allí. Su pareja no tiene nombre y se cree que es una flor delicada que solo dura un momento. A veces, su pareja la asusta al llevarse todo y nunca parar. Cuando por fin llega la mirada de su pareja, será una experiencia dolorosa e intensa. Su pareja no ha dado nada al mundo, pero cuando eso suceda, se sentirá como un crescendo de dolor. Será como mirar dentro de sí misma. Cuando el amanecer explota, será el final de todo y se sentirá como caer al suelo. A veces, la protagonista se suspende como hojas soplando al viento, solo para llegar a su pareja. Su pareja es como una melodía celestial que cambia todo por un momento. Cuando llegue el verano, será un crescendo doloroso y sentirá tener a su pareja de nuevo. A veces, piensa en su pareja y se da cuenta de que él rompe todos sus límites. Será hermoso entregarse al mundo. Cuando el amanecer explote, vivirá en el fuego de una estrella y dejará la tierra con su pareja.