El protagonista siente que solo tiene valor cuando alguien necesita algo de él y cree que las personas solo lo buscan por avaricia. Se compara a sí mismo con el oro que está cubierto de tinta negra del pasado donde fue quemado. Sin embargo, él desea ser algo que su pareja necesita y está dispuesto a cambiarse a sí mismo para encajar en ese papel. Le pide a su pareja que lo convierta en algo útil, como una taza o joyería, para que pueda ser un recordatorio constante en su vida. Expresa su amor por ella y le pide que no lo convierta en otra excusa, sino que lo haga sentir como él mismo para que él pueda hacerla sentir como ella misma también. Concluye diciendo que su amor lo hace sentir vivo.