La canción habla de una pareja que está atrapada en un ciclo de cometer los mismos errores en su relación, lo que los lleva a jugar los mismos juegos y esperar que el final cambie mágicamente. El protagonista reconoce que necesitan trabajar juntos para descubrir qué salió mal y acercarse y fortalecerse más que antes. Sin embargo, se les está acabando el tiempo y necesitan tomar una decisión antes de repetir los mismos errores nuevamente. El puente advierte sobre no mirar atrás, pero también reconoce que no aprender de los errores pasados llevará a cometer los mismos errores una y otra vez.