La letra trata sobre una relación en la que el protagonista y su pareja nunca expresan sus sentimientos el uno al otro. Nunca se han dedicado las canciones adecuadas ni han dicho las palabras correctas. El protagonista siente un constante anhelo y sed de su pareja, pero la ciudad en la que viven está llena de distracciones y se siente solo. Desea que el nombre de su pareja llueva sobre él en medio de las calles, para poder beber su presencia. El protagonista también se siente perdido sin su pareja y está dispuesto a pagar para que se quede, disculpándose por pensar en voz alta. Al final, reflexionan sobre cómo nunca se han entregado realmente el uno al otro, posiblemente porque nadie nunca habla de ellos.