El protagonista se siente derrotado y sin esperanza, ya que ha perdido su fuerza y el tiempo se acaba. Habla de cómo viene del pueblo de Pego y no sabe qué ha pasado con sus compañeros. A pesar de la pérdida de esperanza, expresa su determinación de luchar contra el fascismo y enviar un mensaje a sus opresores de que no volverán. La letra también menciona las dificultades que enfrenta el protagonista y sus camaradas, como ser escupidos y que sus hijos pasen hambre. Animan a los jóvenes de Pego a mantener el fuego de la resistencia encendido y afirman que incluso si solo quedan cenizas, la lucha continuará.